domingo, 13 de marzo de 2011

El máximo espectáculo del mundo deportivo.

A veces, en los deportes de equipo, al ver un partido desde tu casa, sentado, en pijama y tomándote una cerveza o un refresco sabes de que se trata, tan solo viendo unos minutos te puede gustar o no. Pero hay deportes en los cuales tienes que ver un partido, no un simple partido, si no una final, en medio de los aficionados para saber exactamente que es lo que hace bonito y único a ese deporte. Ese es el caso del fútbol americano, ese es el caso de la Super Bowl. 
El trofeo Vince Lombardi.
Esta final, que la disputan los equipos ganadores de la Conferencia Nacional y Conferencia Americana, no es solo una final para conseguir el trofeo, sino que el equipo que lo obtenga  sera quien conserve la gloria durante un año al ser campeón de América.
Se juega el primer domingo de febrero. El primer encuentro del Super Bowl se jugó el 15 de enero de 1967 como parte de un acuerdo entre la National Football League y el otro campeonato existente por aquel entonces, la American Football League (AFL), para que los vencedores de cada competición jugaran un partido que decidiera al campeón de Estados Unidos. Cuando la AFL se integró en la NFL, cada liga se convirtió en una conferencia y el juego pasó a ser entre sus campeones. El equipo que más veces ha ganado ha sido Pittsburgh Steelers (seis ocasiones), y sólo hay cuatro de las 32 franquicias de la NFL que nunca han jugado la final.2 El actual campeón es Green Bay Packers.
Al margen del evento deportivo, el Super Bowl es uno de los acontecimientos sociales más importantes en Estados Unidos. Está considerado como un acto social en el que la gente se reúne para ver el partido, y es la segunda fecha del año en la que más comida y bebida se consume, por detrás del Día de Acción de Gracias.5
La NFL y la mayoría de equipos del campeonato organizan actividades en los alrededores del campo de fútbol, destinadas a todos los públicos. La mayoría están relacionadas con el fútbol americano, como firmas de jugadores famosos o pruebas físicas. Sin embargo, también se organizan conciertos en los aledaños al estadio con grupos populares.
Además, es el único partido de la temporada en el que los dos equipos pueden llevar a sus equipos de animadoras (cheerleaders). La primera vez que apareció este tipo de animación fue en el Super Bowl X celebrado en 1976, con el grupo de cheerleaders de Dallas Cowboys.

Himno nacional

Al comienzo del partido hay varias actuaciones musicales, números de orquestas universitarias y saludos por parte de diversas autoridades, que culminan con la interpretación del himno nacional de los Estados Unidos, "The Star-Spangled Banner". El artista elegido para intepretarlo suele destacar por su capacidad vocal, tener una carrera consagrada, y su elección se hace pocos días antes de disputarse la final. El himno se interpreta en vivo y en directo acompañado por una orquesta, y aunque teóricamente existe la posibilidad de que el cantante pueda hacer playback, esto es criticado si se descubre.
Suele ser interpretado por una mujer, caso de Whitney Houston (1991), Mariah Carey (2002) Beyoncé (2004) o Cristina Aguilera (2011) entre otras, aunque también puede darse el caso de que lo cante un hombre, como ocurrió con Barry Manilow en 1984. El himno también pueden cantarlo grupos, como Backstreet Boys (2001) o Dixie Chicks (2003), o coros militares y universitarios (2005).

Descanso (Halftime show)

Cada Super Bowl ha contado con un espectáculo musical celebrado en el descanso del partido (halftime show) desde su primera edición. Aunque en un principio estaba protagonizado por las bandas musicales de las universidades estadounidenses, la popularidad del evento hizo que los cantantes y grupos más populares del momento ganaran protagonismo. A diferencia de otros intermedios con menor duración, la NFL autoriza que el descanso del Super Bowl dure 30 minutos para que puedan realizarse las actuaciones, y su presupuesto es muy superior al de cualquier actuación realizada en otras circunstancias.
A lo largo de la historia, ha habido actuaciones que han trascendido más allá del partido. Tras varios años con pérdida de espectadores a otros canales durante el descanso, la NFL contrató para la Super Bowl XXVII celebrada en 1993 a Michael Jackson, quien cantó junto con 3.500 niños su sencillo "Heal the World". El éxito de audiencia hizo que la liga contratase artistas famosos y mejorase la calidad del show. En 2002 la actuación de los irlandeses U2 también obtuvo repercusión en los medios, ya que Bono homenajeó a las víctimas del atentado del 11 de septiembre durante la canción "Where the Streets Have No Name".
El espectáculo del descanso de la Super Bowl XXXVIII, celebrada en 2004, fue uno de los más polémicos de la historia(sino el mas polémico), después de que el cantante Justin Timberlake, mientras interpretaba su tema Rock Your Body, al terminar la canción, le quitó a Janet Jackson una pieza de su vestido al final de la actuación, descubriendo uno de sus senos con una estrella que recubría todo el pezón. La imagen sólo pudo verse durante un segundo en la emisión en directo, pero fue difundida con rapidez a través de Internet y varias asociaciones de espectadores protestaron por el show. El incidente, que pasó a conocerse como Nipplegate, le costó a CBS y todas sus emisoras afiliadas una multa de 550.000 dólares por parte de la Comisión Federal de las Comunicaciones (FCC), aunque dicho organismo levantó la sanción en 2008. Después del incidente, la emisión de espectáculos en directo en los Estados Unidos se hace con cinco segundos de retardo.

Cobertura en televisión

Tradicionalmente, el Super Bowl ha sido uno de los programas de televisión más vistos en los Estados Unidos y la retransmisión suele liderar las audiencias de este medio cada año. Durante el encuentro, la cadena que lo retransmite obtiene una cuota de pantalla entre el 40% y el 60, según datos de AGB Nielsen, lo que se traduce en cerca de 120 millones de espectadores que sintonizan con el partido al menos en alguna ocasión. Además, la señal del encuentro se transmite a más de 200 países, por lo que la audiencia se multiplica hasta cien millones de personas en todo el mundo.
La primera final que rompió récords de audiencia fue el Super Bowl XVI, celebrado en 1982 y que enfrentaba a San Francisco 49ers contra Cincinnati Bengals. El choque fue seguido por el 49% de los hogares con un share del 73%, y se alcanzó esa cifra porque una fuerte ventisca afectó a la costa noreste del país, lo que provocó que muchas personas prefirieran quedarse en sus casas para seguir el encuentro. Actualmente, el espacio más visto de la historia en los Estados Unidos es el Super Bowl XLV de 2011, con 111 millones de espectadores. La edición XLIV de 2010 desbancó del puesto al último capítulo de la serie M*A*S*H, emitido en 1983, que hasta ese año fue el programa con más audiencia del país.
Actualmente, los derechos de emisión de este partido corresponden a CBS, NBC y FOX, turnándose cada año. Anteriormente ABC también retransmitía el Super Bowl, aunque dejó de hacerlo cuando renunció al fútbol americano en televisión. La primera final fue retransmitida de forma simultánea entre CBS y NBC, y a partir de 1968 las cadenas comenzaron a repartirse las emisiones. Por su parte, el primer encuentro emitido para todo el país fue el edición VII de 1973, ya que hasta ese año los partidos se restringían en las ciudades con equipos en la final para evitar que la gente no acudiera a los estadios.
Después del partido, es tradicional que el canal que lo ha retransmitido emita un programa o serie de televisión del que espera obtener buenas audiencias. Ejemplos de ello fueron los estrenos de The A-Team (1983), Padre de Familia (1999) o American Dad! (2006) entre otros programas. Las redes también aprovechan para emitir sus series con un capítulo especial, alejado de la trama principal para atraer más público, como ha ocurrido con Los Simpson (con el episodio "Sunday, Cruddy Sunday") o House (en "Frozen").

Publicidad

Las franjas comerciales durante el partido de Super Bowl son las más caras de la televisión en Estados Unidos, por lo que muchas empresas deciden comprar esos espacios para emitir sus anuncios más costosos y sus mayores producciones. El primer anuncio de esas características fue "1984" de Apple, dirigido por Ridley Scott, que revolucionó el concepto de la publicidad emitida en este acontecimiento. Desde entonces, muchas empresas usan este espacio para dar a conocer sus propuestas más creativas y sus nuevos productos, e incluso algunos diarios como USA Today organizan un concurso para premiar al mejor anuncio del Super Bowl. Es habitual también la presencia de anuncios fijos, como la campaña de Disney "I'm going to Disney World!", en la que futbolistas y celebridades del país animan a la gente a acudir al parque temático.
El número de espacios destinados a la publicidad está limitado y, debido a la audiencia que puede alcanzar el partido, su precio es muy elevado. En 2010, una empresa que quisiera colocar un spot de 30 segundos durante el partido tenía que abonar cerca de 2,5 millones de dólares (1,7 millones de euros). El precio de los anuncios ha ido en aumento excepto en 2009 y 2010, cuando por primera vez en su historia bajaron debido a la crisis financiera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario